sábado, 4 de febrero de 2012

Oraciones por los difuntos

Madre amorosísima de Luján, poderosa intecesora, rogad por.......en la presencia del Señor y extended sobre el hogar de los suyos, vuestro manto protector. Por los méritos de Jesucristo Señor Nuestro. Asi sea. (Ave María)

Inclina ¡Oh Señor! tus oídos a nuestros ruegos, con los que humildemente imploramos tu misericordia en favor del alma de tu siervo .........que sacaste de la cárcel de esta vida para que te dignes colocarla en la región de la paz y eterna luz en compañía de tus Santos. Por Cristo Nuestro Señor. Amén (Padre Nuestro)

¡Dulcísimo Jesús! Redentor y Salvador de las almas, dignáos abrir los brazos de vuestra misericordia para recibir en ellos a vuestro siervo ..........a fin de que le sean perdonadas las culpas que por humana fragilidad pudo cometer en esta vida, y vaya cuanto antes a gozar de la dicha eterna en el reino celestial de vuestra gloria. Así sea.

Inclina, Señor, tus oídos a nuestras súplicas con las que imploramos tu misericordia, a fin de que pongas en el lugar de la paz y de la luz al alma de tu siervo........... al cual mandaste salir de este mundo.

Oraciones por los difuntos


Oh Dios y Señor, cuya misericordia es infinita humilde y devotamente os suplicamos que os apiadéis del alma de vuestro siervo........., y que purificada de toda culpa la llevéis cuanto antes a la eterna bienaventuranza.

Os recomendamos Señor a vuestra sierva tan cariñosa para los suyos y tan afectuosa para cuantos la trataron. ¡Oh Jesús! Sed para ella padre misericordioso y recibidle en vuestro seno.

Dios todopoderoso y misericordioso, os rogamos, por los méritos de la vida, pasión y muierte de Nuestro Señor Jesucristo, vuestro Hijo y por la intercesión de María Santísima libréis de las penas del purgatorio a vuestro siervo..........y lo llevéis a gozar de vuestra compañía por toda la eternidad. Amén.

Oraciones por los difuntos



Inclina, Señor, tus oídos a nuestras súplicas con las que humildemente imploramos tu misericordia, a fin de que coloques el alma de tu siervo..........., que mandaste salir de este mundo, en la región de la luz y de la paz.

Te rogamos Dios Omnipotente concedas el eterno descanso al alma de tu siervo que creyó en Vos y murió en Vos, esperando tu misericordia. Valora nuestras súplicas con los méritos de nuestro Redentor Jesucristo y conforme a su promesa haz que viva en vuestra paz.

¡Oh Dios clemente! que habéis prometido la gloria a los que hicieron el bien, deja caer una mirada de amor sobre tu siervo ................y haz brillar a sus ojos la luz de vuestro cielo. Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.

A San Nicolás de Tolentino

¡Oh glorioso Taumaturgo y Protector de las almas del purgatorio, San Nicolás de Tolentino! Con todo el afecto de mi alma te ruego que interpongas tu poderosa intercesión en favor de esas almas benditas, consiguiendo de la divina clemencia la condonación de todos sus delitos y sus penas, para que saliendo de aquella tenebrosa cárcel de dolores, vayan a gozar en el cielo de la visión beatífica de Dios. Y a mi, tu devoto siervo, alcánzame, ¡oh gran santo!, la más viva compasión y la más ardiente caridad hacia aquellas almas queridas. Amén

Fuente: http://www.devocionario.com/varias/almas_1.html



Rosario por las Almas del Purgatorio


CREDO-PADRENUESTRO-3 AVEMARÍAS-GLORIA

SOBRE LAS CUENTAS GRANDES

Padre eterno,
Por la Sangre Preciosa de Jesús vertida por nosotros y por Tu Gracia Santa, Extiende Tu Mano y vierte Tu Misericordia
Sobre nuestros hermanos las almas del Purgatorio

SOBRE LAS CUENTAS PEQUEÑAS

Señor Jesús,
por Tu Pasión y por Tu Cruz,
Te suplicamos,
Libera a las almas del Purgatorio

Oración final ( después de las cinco decenas)

Padre infinitamente Bueno,
A Ti por quien todo fue creado,
Te suplicamos, que por el Agua y la Sangre que brotan del Corazón de Jesús, Hagas bajar Tu Misericordia hasta lo más profundo del Purgatorio para retirar de allí a las almas sufrientes que permanecen lejos de Ti.
Ábreles las puertas de Tu Reino, para que cerca de Ti, compartan las Alegrías Eternas. Por María, Nuestra Madre, Te lo suplicamos. Amen


Tres preces


Os encomiendo, oh almas atribuladas al amor infinito que ha movido al Hijo de Dios a bajar a esta tierra y a morir en la Cruz. Su amor os libre de vuestras penas. Amén.

Os encomiendo en la preciosa Sangre de Jesús y en su muerte amarguísima. Su amor os purifique de vuestros pecados. Amén.

Os encomiendo también en la obediencia de Jesús, en toda la pobreza y la ingominia que ha padecido por vosotros durante su vida. Que El os conduzca a la vida eterna. Amén.

Por las almas detenidas en el Purgatorio


Oh Jesús, escuchad los clamores de vuestros hijos. Ellos gimen y claman por Vos en sus grandes dolores. Refrigeradlas con vuestra Sangre preciosa. Enviadles vuestro Angel libertador y conducidlas de su dolorosa prisión a la gloria de vuestra presencia. Dios Espíritu Santo, tened piedad de ellos. Amén.

Oracion por los sacerdotes difuntos


Oh Espíritu Santo, por los méritos de Jesucristo y de su Madre virginal, de San José y de todos los Santos, os suplico, consoléis a las almas de los sacerdotes detenidas en el Purgatorio admitiéndolas a vuestro amor paternal. Para reparar lo que han faltado contra Vos, os ofrezco los padecimientos de Jesús en el pesebre, en el desierto y en la Cruz, el amor casto de vuestra Inmaculada Esposa, de San José y de los santos mártires. En atención a estos méritos perdonadles y aceptadlas como coherederos de Jesús en el reino del Padre. Amén.


Padrenuestro de los difuntos


¡Padre Nuestro que estás en los cielos! Te ruego perdones a las pobres ánimas del Purgatorio el no haberte amado y tributado el homenaje debido. Tú eres su Padre adorable y bondadosísimo. Tú las adoptaste por hijas. Tú derseabas morar en ellas para siempre; pero ellas durante algún tiempo de su vida terrestre se alejaron de Tí.
En expiación de su culpa te ofrezco aquel amor y aquella honra que te ha dado tu Hijo muy amado durante su vida mortal, y aquella satisfacción superabundante, con que ha pagado todas sus deudas.

¡Santificado sea el Tu nombre! Te ruego, oh Padre clementísimo, perdones a las almas de los difuntos, que no veneraron dignamente tu santísimo nombre, acordándose tan pocas veces de él con devoción; que lo han pronunciado tantas veces en vano, haciéndose por su vida pecaminosa, indignos del nombre de cristianos.
En expiación de estos pecados te ofrezco la santidad perfectísima de tu Hijo, con que ha honrado tu nombre benditísimo por su predicación, y sus obras.

¡Venga a nos el tu reino! Te ruego, oh bondadosísimo Padre, perdones a las almas de los difuntos, que no desearon ni buscaron con afán a Ti y a tu Reino, en el cual se halla la verdadera paz y la gloria eterna.
Por esta negligencia y pereza en el bien te ofrezco el deseo vehemente y santísimo de tu Hijo, de haverlos para siempre coherederos de su gloria.

¡Hágase tu voluntad, así en la tierra como en el cielo! Te ruego, Padre bondadosísimo, perdones a las almas de los difuntos, el no haber amado siempre tu voluntad santísima, viviendo y obrando con frecuencia segúnsu voluntad propia.
En expiación de su desobediencia, te ofrezco la unión del Corazón dulcísimo de tu Hijo, con tu voluntad, como también la prontitud y perfección de su obediencia hasta la muerte de Cruz.

¡El pan nuestro de cada día dánosle hoy! Te ruego, oh Padre bondadosísimo, perdones a las almas de los difuntos, por haberse acercado con tan poco amor y devoción y tan raras veces a la Sagrada Mesa.
Por estos sus pecados te ofrezco la santidad y devoción de tu Hijo, como asimismo su amor ardiente y sui inefable deseo con que nos ha dado este precioso tesoro.

¡Perdónanos nuestras deudas así como nosotros perdonamos a nuestros deudores! Te ruego, oh Padre bondadosísimo, perdones a las almas de los difuntos todo lo que han faltado en cuanto a los pecados capitales, en particular, por no haber amado a sus enemigos; por nmo haber querido perdonar a los que les habían ofendido.
Por estos pecados te ofrezco la ferviente plegaria, que hizo tu Hijo en la Cruz por sus enemigos.

¡No nos dejes caer en la tentación! Te ruego, oh Padre bondadosísimo, perdones a las almas de los difuntos que, sin hacerse violencia, han seguido el impulso de sus malas inclinaciones.
Por estos sus múltiples pecados te ofrezco la victoria gloriosa de tu Hijo por la que venció al mundo y al demonio. Te ofrezco también su santísima vida con todas las fatigas, trabajos, cansancios y su muerte amarguísima en la cruz.

Líbranos a nosotros y todas ellas de todo mal y de todos los castigos, por los méritos de tu muy amado Hijo, y condúcenos a todos al Reino de tu gloria, que eres Tú mismo.

Amén

Por un difunto


Haced, oh Dios omnipotente, que el alma de vuestro siervo (o sierva) N. que ha pasado de este siglo al otro, purificada con estos sacrificios y libre de pecados, consiga el perdón y el descanso eterno. Amén.

Ruego por los difuntos


Dios omnipotente, Padre de bondad y de misericordia, apiadaos de las benditas almas del Purgatorio y ayudad a mis queridos padres y antepasados.

A cada invocación se contesta: ¡Jesús mío, misericordia! Ayudad a mis hermanos y parientes.
Ayudad a todos mis bienhechores espirituales y temporales.
Ayudad a los que han sido mis amigos y súbditos.
Ayudad a cuantos debo amor y oración.
Ayudad a cuantos he perjudicado y dañado.
Ayudad a los que han faltado contra mí.
Ayudad a aquellos a quienes profesáis predilección.
Ayudad a los que están más próximos a la unión con Vos.
Ayudad a los que os desean más ardientemente.
Ayudad a los que sufren más.
Ayudad a los que están más lejos de su liberación.
Ayudad a los que menos auxilio reciben.
Ayudad a los que más méritos tienen por la Iglesia.
Ayudad a los que fueron ricos aquí, y allí son los más pobres.
Ayudad a los poderosos, que ahora son como viles siervos.
Ayudad a los ciegos que ahora reconocen su ceguera.
Ayudad a los vanidosos que malgastaron su tiempo.
Ayudad a los pobres que no buscaron las riquezas divinas.
Ayudad a los tibios que muy poca oración han hecho.
Ayudad a los perezosos que han descuidado tantas obras buenas.
Ayudad a los de poca fe que descuidaron los santos Sacramentos.
Ayudad a los reincidentes que sólo por un milagro de la gracia se han salvado.
Ayudad a los padres que no vigilaron bien a sus hijos.
Ayudad a los superiores poco atentos a la salvación de sus súbditos.
Ayudad a los pobres hombres, que casi sólo se preocuparon del dinero y del placer.
Ayudad a los de espíritu mundano que no aprovecharon sus riquezas o talentos para el cielo.
Ayudad a los necios, que vieron morir a tantos no acordándose de su propia muerte.
Ayudad a los que no dispusieron a tiempo de su casa, estando completamente desprevenidos para el viaje más importante.
Ayudad a los que juzgaréis tanto más severamente, cuánto más les fue confiado.
Ayudad a los pontífices, reyes y príncipes.
Ayudad a los obispos y sus consejeros. Ayudad a mis maestros y pastores de almas.
Ayudad a los finados sacerdotes de esta diócesis.
Ayudad a los sacerdotes y religiosos de la Iglesia católica.
Ayudad a los defensores de la santa fe.
Ayudad a los caídos en los campos de batalla.
Ayudad a los sepultados en los mares.
Ayudad a los muertos repentinamente.
Ayudad a los fallecidos sin recibir los santos sacramentos.
V. Dadles, Señor, a todas las almas el descanso eterno.
R. Y haced lucir sobre ellas vuestra eterna luz.
V. Que en paz descansen.
R. Amén.

Fuente: http://www.devocionario.com/varias/almas_1.html


Jaculatorias y suplicas


Dignaos Dios mío no separar en el cielo a aquellos que tan unidos estuvimos en la tierra.

Jesús Misericordioso, dadles el descanso eterno.

Misericordiosísimo Jesús, dadle el descanso eterno.

San José, amante del Sagrado Corazón rogad por él

Jesús mío misericordia.

Oh dulcísimo Jesús no seais su Juez sino su Salvador.

Dad Señor el eterno descanso al alma de tu siervo .......y haced que la luz perpetua brille sobre él. (Padre Nuestro y Ave María)

Jesús mío muy misericordioso, dadle el descanso eterno.

Piadoso Señor Jesús, dadles el descanso eterno.

viernes, 3 de febrero de 2012

Oracion que libera mil almas


Oración enseñada por Jesús a Santa Gertrudes para liberar mil almas del Purgatorio:
"Oh Padre Eterno, os ofrezco la más preciosa Sangre de vuestro Divino Hijo, Jesús, unido a las Misas celebradas hoy alrededor del mundo, por todas las santas almas del Purgatorio. Amén"

jueves, 2 de febrero de 2012

Una linda devoción


Rezar por las almas del Purgatorio:
-5 Credos
-1 Salve
-1 Padrenuestro
-1 AveMaría
-1 Gloria
-3 Requiem (Dales Señor el descanso eterno y brille para ellas la luz perpetua)

Invocaciones a la Virgen del Carmen


INVOCACIONES A LA VIRGEN DEL CARMEN A FAVOR DE LAS ALMAS DEL PURGATORIO

¡Oh María! Dirigid una mirada bondadosa sobre las almas que sufren en el Purgatorio. Dulcificad el ardor de las llamas que las purifican y aligerad sus agudos dolores.
¡Oh María! ¡escuchad sus gemidos! Mirad sus brazos deprecatorios levantados hacia Vos, pidiéndoos el fin de sus tormentos y su entrada en los eternos gozos.
¡Oh María! Virgen benéfica, escuchad nuestras súplicas; doleos de esas almas que podéis arrancar de la muerte; alcanzad su gracia y sed para ellas el camino que conduce al descanso eterno.
¡Oh María! Hija y Madre del Supremo Rey, que vuestra dulce clemencia venga a nuestro socorro ahora y en la hora del juicio.
¡Oh María! cuando comparezcamos ante nuestro Divino Juez, sed nuestra defensa, y por vuestra poderosa intercesión alcanzadnos perdón y misericordia. Así sea.

Tres Padrenuestros


Rezar tres Padrenuestros por las siguientes intenciones:

1. Por el alma más abandonada del Purgatorio.
2. Por el alma que más padece en el Purgatorio.
3. Por el alma que más tiempo ha de estar en el Purgatorio.